Los proyectos de investigación se titulan “La reformulación de los principios cooperativos en la actualidad” y “El gas renovable en la economía circular. Retos regulatorios para la transición de la industria del gas”.
El Centro de Investigación de la UAL, CIDES, ha obtenido “unos magníficos resultados en la convocatoria de Proyecto de I+D+i del Plan Andaluz de Investigación, Desarrollo e Innovación (PAIDI 2020) con la consecución de dos proyectos de investigación”, afirma su director, Carlos Vargas Vasserot.
En la modalidad de Proyecto de I+D+i de generación de conocimiento «frontera», ha sido seleccionado el titulado “La reformulación de los principios cooperativos en la actualidad” (IUSCOOP), cuyo investigador principal es el profesor Carlos Vargas Vasserot, catedrático de Derecho Mercantil y director del CIDES. El proyecto, conformado por 17 miembros del equipo de investigación y numerosos colaboradores extranjeros, se centra en el estudio multidisciplinar y transversal y de un marcado carácter internacional de aspectos fundamentales del cooperativismo desde la óptica de la aplicación de los principios de buen gobierno cooperativo a este tipo de entidades de la economía social y su adaptación a las actuales demandas sociales, económicas y ambientales. Cabe señalar que en esta modalidad de proyectos frontera, de los aproximadamente 300 concedidos para toda Andalucía, aparte del obtenido por el CIDES, ninguno trataba de aspectos relacionados con la economía social y sólo tres de todos ellos tenían un perfil jurídico.
Por otro lado, en la modalidad de Proyecto de I+D+i orientados a los retos de la sociedad andaluza, el CIDES ha conseguido el proyecto sobre “El gas renovable en la economía circular. Retos regulatorios para la transición de la industria del gas”, liderado por el profesor Íñigo del Guayo Castiella, catedrático de Derecho Administrativo de la UAL y reputado especialista en Derecho de la energía. En particular, el proyecto concedido persigue identificar cuáles son las reformas normativas y regulatorias necesarias para fomentar la producción de gas renovable en todas sus modalidades (biometano, biogás y metano procedente de hidrógeno renovable o power-to-gas), algo básico dada el necesario y paulatino descenso de la producción del gas natural por el reto de descabonización de la economía fijado por la Unión Europea en 2050.